Wolfwalkers: Combinando Animación Tradicional con 3D

Si bien es cierto que la animación 3D está en auge, esto no significa que el 2D haya dejado de ser relevante en nuevas producciones cinematográficas. Por el contrario, hemos visto un resurgimiento en el éxito obtenido por distintas películas animadas en 2D recientemente. Incluso se podría decir que hay películas que combinan ambos estilos de animación a la vez. Algunos casos donde se puede apreciar esta combinación son Klaus, Into the Spider-Verse y Wolfwalkers, por mencionar algunas.

La denominada “animación 2.5D” se utiliza para brindar profundidad y dinamismo a las imágenes mientras se mantiene el estilo característico de las técnicas tradicionales. De esta manera, se combinan los más recientes tecnológicos con la calidad y atención al detalle de los dibujos hechos a mano. Precisamente, algunas de las escenas más importantes en Wolfwalkers fueron logradas mediante el uso de realidad virtual y cgi, en conjunto con animación tradicional cuadro por cuadro.

Y aunque la “animación 2.5D” se utiliza desde los tiempos de La Bella y la Bestia o Tarzán, hoy en día resultan más sorprendentes los resultados. Por ejemplo, el candelabro y la jungla en ciertas escenas especiales eran elementos en 3D respectivamente. En el caso de Wolfwalkers, el bosque también resultó ser un elemento generado por cgi en algunas de las escenas más importantes, pero este nunca llegó a aparecer en la versión final de la cinta. Por el contrario, un grupo de animadores se dieron a la tarea de recrearlo por completo mediante dibujos hechos a mano en hojas de papel.

Este revolucionario proceso fue creado con ayuda del animador Eimhin McNamara, donde primero se creaban todos los escenarios mediante realidad virtual y cgi. Utilizando el sistema de Oculus Rift, construyeron un bosque 3D en realidad virtual, con la ayuda de Medium, un programa de modelado. Posteriormente se imprimían todas esas imágenes y se trazaban con carboncillo y lápiz. De esta manera, pudieron crear escenarios más realistas y afinar la animación en los movimientos de los lobos, logrando un estilo artístico único.

“Usamos movimientos de cámara y animación tradicional junto a imágenes previsualizadas en 3D para crear la visión de los lobos, de modo que la audiencia pudiera presenciar cómo es que estos personajes ven el mundo a su alrededor a la hora de correr por el bosque. Nunca habíamos hecho algo similar anteriormente pero dio excelentes resultados”.Ross Stewart, director de Wolfwalkers.

Para la cinta de Tarzán, los animadores de Disney utilizaron el programa de Deep Canvas para crear una jungla en 3D donde el personaje 2D habría de moverse. Esto es tal cual lo que vemos en pantalla. Pero en Wolfwalkers, la audiencia no es capaz de ver el modelo 3D que se utilizó durante la producción. Todas estas imágenes fueron cubiertas por dibujos 2D realizados con grafito y carboncillo. En palabras de McNamara, el punto era utilizar las bases del 3D para lograr un mejor efecto en la transición al 2D.

En total se elaboraron más de 6,000 dibujos, los cuales fueron posteriormente escaneados, retocados e incorporados en la composición final de cada escena. Aparte de estas escenas especiales, el resto de los escenarios fueron dibujados a mano en Photoshop por un equipo de aproximadamente 300 artistas. Inspirados por una cinta de Studio Ghibli, “La Historia de la Princesa Kaguya”, simularon el estilo de la acuarela para lograr un ambiente más orgánico en las escenas que tomaban lugar en el bosque. Esto habría sido imposible de lograr únicamente con cgi. Todo con el fin de resaltar el increíble talento de los artistas en Cartoon Saloon.